Después de un año de estancamiento, confusión y preguntas, las empresas podrían tener la tentación de irrumpir de nuevo en escena con una filosofía de crecimiento a toda costa. Debe hacer todo lo que sea necesario para compensar el tiempo perdido, y si eso implica salirse de algunas de las líneas de políticas que ya había diseñado, bueno, que así sea.
O no. Esas líneas se trazaron por una razón y, a menudo, esa razón es dinero. Sus políticas y protocolos se diseñaron para proteger a su organización del exceso de gasto, los gastos inútiles, los gastos fraudulentos y cualquier otro tipo de gasto que suponga un alto coste para su empresa.
Realizar negocios transfronterizos traza otras líneas en la arena, y los requisitos, restricciones y regulaciones impuestos por los gobiernos locales, nacionales y extranjeros son líneas que no debería cruzar. A menos que, por supuesto, su empresa pueda permitirse pagar las multas o financiar sin problema una pesadilla de relaciones públicas.
Así que, como siempre, tiene que moderar su crecimiento gestionando cuidadosamente su gasto. Y eso significa asegurarse cuidadosamente de que está siguiendo las reglas.
El cumplimiento no es un mal necesario, es solo necesario.
Su compromiso con el crecimiento en el entorno actual es aplaudido y comprensible. Todo el mundo quiere lo mismo: Levantarse, sacudirse el polvo y empezar a crecer. Para ello, tendrá que comprometerse a mejorar de forma continua y a examinar con honestidad cómo ha estado haciendo las cosas.
¿Hay formas de avanzar más rápido? ¿Hay cosas que puede hacer de forma diferente para obtener mejores resultados? ¿Los procesos y políticas (es decir, el cumplimiento) que siempre ha tenido encajan con la forma en que hace negocios ahora?
Independientemente de sus respuestas, siempre es buena idea contar con las herramientas adecuadas, a fin de que:
¿Cómo podrían ser esas herramientas? Necesita herramientas que le permitan, por ejemplo, lo siguiente:
Una docena de formas de crear una cultura de cumplimiento.
Cuando el gasto conforme es más fácil que el gasto no conforme, adivine lo que ocurre: La gente sigue las reglas y usted no rompe los presupuestos. Y, lo que es igual de importante, no parece que haya órdenes que deban seguirse o restricciones que deban vigilarse. Es más fácil para todos los miembros de la empresa elegir proveedores preferidos y ceñirse a los precios negociados. Es más fácil para toda la empresa mantener el cumplimiento.
Con la solución adecuada en el trabajo, permanecer dentro de lo establecido en la política de gastos se convierte en parte de la cultura empresarial, el cumplimiento se produce de forma natural y, como sabe lo que tiene que gastar, el crecimiento es más fácil de gestionar.
Esta hoja de consejos le proporciona 12 consejos que debe tener en cuenta al examinar la gestión del cumplimiento o buscar nuevas soluciones. Descárguela ahora para obtener más información sobre consejos útiles que puede poner en práctica para reforzar el cumplimiento de sus gastos.